Para distinguir entre los de corto y largo plazo se pueden decir muchas cosas. A mí me gusta esta sencilla analogía: “si los objetivos a largo plazo son el destino, los objetivos a corto plazo son la hoja de ruta”. Al respecto, e independiente de si lo percibe o no, seguramente, usted ya está ejerciendo su cotidianidad a punta de un derrotero de objetivos a corto plazo. Es decir, por ejemplo; está usted ordenando su lista de quehaceres pendientes antes de su próxima reunión, saliendo a caminar en las mañanas antes del desayuno al menos tres días por semana o pretendiendo confirmar tres citas comerciales en esta semana.

Así pues, y en línea con el propósito de los objetivos a corto plazo, las personas, a lo largo del día, semana, mes o año, establecen líneas de meta alcanzables y de mínima repercusión que les dan un pequeño impulso hacia adelante.

En ese orden de ideas, y como para entender qué es aquello que los hace tan especial en la cotidianidad de las personas, exploremos el poder detrás de la fijación de objetivos a corto plazo y cómo dominarlos para aumentar así su propia motivación y sentido de satisfacción.

Las metas a corto plazo pueden tener un impacto significativo tanto en nuestras vidas como en los factores de éxito en general. Si bien las metas a largo plazo brindan una visión y una dirección, a menudo son las metas a corto plazo las que sirven como peldaños para lograr esos objetivos más considerables. Para el efecto, he aquí algunas de las razones por las que las metas a corto plazo son relevantes. A saber:

Enfoque y motivación— Las metas a corto plazo descomponen una visión a largo plazo en movimientos manejables y accionables. Nos proporcionan un enfoque claro y nos motivan a tomar medidas inmediatas. Al establecer metas a corto plazo, podemos mantener nuestro entusiasmo e impulso a medida que avanzamos hacia nuestras aspiraciones más grandes.

Generar impulso— Lograr objetivos a corto plazo crea una sensación de logro y genera impulso. Cada pequeño éxito nos impulsa hacia adelante, reforzando nuestra creencia en nuestras habilidades y aumentando nuestra confianza. Este circuito de retroalimentación positiva nos ayuda a mantenernos motivados y nos anima a seguir luchando por el éxito.

Flexibilidad y adaptabilidad— Las metas a corto plazo nos permiten adaptarnos y hacer los ajustes necesarios sobre la marcha. A medida que trabajamos hacia nuestros objetivos a largo plazo, podemos encontrarnos con obstáculos imprevistos o circunstancias cambiantes. Establecer metas a corto plazo nos permite evaluar nuestro progreso regularmente y hacer las modificaciones necesarias a nuestro enfoque.

Medición y evaluación— Los objetivos a corto plazo proporcionan métricas claras para medir el progreso. Al desglosar un objetivo más grande en hitos más pequeños, podemos seguir nuestro avance y evaluar nuestro desempeño de manera más efectiva. Revisar regularmente nuestros objetivos a corto plazo nos ayuda a identificar áreas de mejora, celebrar logros y mantenernos encaminados hacia nuestra visión a largo plazo.

Gratificación inmediata— Mientras que las metas a largo plazo a menudo requieren tiempo y esfuerzo antes de que veamos resultados significativos, las metas a corto plazo brindan una sensación de gratificación inmediata. Lograr objetivos a corto plazo nos da una sensación de satisfacción, aumenta nuestra motivación y nos mantiene comprometidos con el proceso.

En ese orden de ideas, las metas a corto plazo juegan un papel fundamental para lograr el éxito a largo plazo. Nos ayudan a mantener el enfoque, generar impulso, adaptarnos a los cambios, medir el progreso y brindar una sensación de gratificación inmediata. Al reconocer y valorar el impacto de los objetivos a corto plazo, podemos navegar de manera efectiva nuestro trayecto hacia nuestras aspiraciones más considerables.

Ahora, y ya que están expuestas las razones principales para establecer objetivos a corto plazo en su existencia, conocer qué son, es el primer paso para aprender a dominarlos.

¿Qué es un objetivo a corto plazo?

Una meta a corto plazo es un objetivo específico y alcanzable que pretende lograr en un período de tiempo relativamente corto. El marco de tiempo para un objetivo a corto plazo puede variar según el contexto, pero generalmente se refiere a un objetivo que se puede lograr en días, semanas o meses, a diferencia de los objetivos a largo plazo que pueden tardar años en lograrse.

Los objetivos a corto plazo suelen ser pasos o hitos que contribuyen al logro de objetivos más considerables a largo plazo. Son específicos, medibles, alcanzables, relevantes y limitados en el tiempo (SMART, de sus siglas en inglés). Estos objetivos están diseñados para ser accionables y enfocados, proporcionando una dirección clara para sus esfuerzos.

Al respecto, he aquí unos cuantos ejemplos de objetivos a corto plazo en diferentes áreas de la vida que recopilé para efectos de ilustrar esta entrada. A saber:

Salud y estado físico— Correr durante 30 minutos tres veces a la semana, perder 5 kilos en un mes o comer verduras con cada comida durante una semana.

Trayectoria profesional— Completar un curso de desarrollo profesional, establecer contactos con cinco profesionales de la industria en un mes o enviar una oferta comercial a tres empresas distintas en un plazo de dos semanas.

Formación académica— Estudiar durante dos horas todos los días para prepararse para el próximo examen, completar el informe de investigación de mercados al final de la semana o mejorar su índice de desempeño en algún tema específico en un determinado porcentaje dentro de un mes específico.

Finanzas personales— Ahorrar una cantidad específica de dinero cada mes, generar y ceñirse a un presupuesto durante tres meses consecutivos o pagar una obligación financiera en particular dentro de un período de tiempo concreto.

Desarrollo personal— Leer un libro cada dos semanas, practicar la meditación durante 10 minutos diarios durante un mes o aprender una nueva habilidad o pasatiempo dentro de un período específico.

En últimas, tenga presente que, las metas a corto plazo deben ser realistas y estar alineadas con sus objetivos a largo plazo. Al establecer y alcanzar metas a corto plazo, va usted progresando con constancia y motivado mientras elabora con esfuerzo para alcanzar sus aspiraciones más considerables.