¿Ha visto la cara que ponen algunos cuando el director técnico le pide al miembro del equipo recién incorporado que se presente o el moderador de algún seminario, curso o taller hace lo propio con los asistentes? Resulta que, muchos de nosotros le tenemos pavor a la autopresentación. La clave para presentarse con confianza, en cualquier contexto, es un proceso sencillo de tres pasos. A saber: Concéntrese en su presente, pasado y porvenir. 1) Presente— Empiece con una declaración en tiempo presente de su actualidad profesional (o personal). Su nombre y cargo o posición de juego es apropiado para comenzar. Si le conceden la oportunidad de elaborar, aprovéchela para compartir otros detalles relevantes, tales como un proyecto que esté gestionando actualmente, su experiencia y trayectoria profesional o su ubicación geográfica. 2) Pasado— Agregue dos o tres aspectos que proporcionen detalles relevantes sobre sus antecedentes y credibilidad. Considere su formación académica, proyectos previos, empleadores o logros. 3) Porvenir— Demuestre interés y entusiasmo por lo que viene. Si está en una entrevista de trabajo o convocatoria, comparta su entusiasmo por las posibles oportunidades en la empresa o el equipo. O, si está en alguna reunión, exprese interés en lo que el equipo se propone alcanzar.