Lo que al respecto sé del asunto, lo resumo en estos tres puntos. A saber:
Comprenda el significado de su marca personal— Solía pensar que esto era un aspecto obvio que se dice con frecuencia en seminarios de desarrollo personal, pero ahora he cambiado de opinión.
Conocer su marca es saber qué tanto vale usted. Cuando se labora en una empresa de gran tamaño, o en un equipo de fútbol, entre otros, se hace bastante difícil determinar qué tanto valor aporta usted al conjunto.
Igual de relevante, es definir la transparencia con la que gestiona usted, particularmente, aquella que va más allá de su propio interés.
En ese orden de ideas, conocer y configurar su marca personal es un componente fundamental para eliminar la incertidumbre que lo rodea cuando se elabora en conjunto. Es decir, ¿sus colegas los perciben como colaborador, guerrero, creativo o, por el contrario, indiferente, flojo, o ingenuo?
Sepa cuáles son sus habilidades sobresalientes— Es bastante sencillo reflexionar en cuanto a las competencias en las que se es bueno, no obstante, ¿alguna vez ha identificado en detalle qué son? Es decir, ¿sabe usted cómo le aportan dichas habilidades en su gestión profesional?
En realidad, no se puede ser competente en todo y, por mucho que nos agrade pensar que somos sobresalientes, en últimas, viene uno en serio teniendo dos o tres mega poderes absolutos. Averigua cuáles son los suyos: adóptelos, comprenda cómo les puede sacar provecho, y utilícelos en su beneficio.
Descifre cómo lo perciben los demás— Este es un asunto sensible, considerando que lo pone a uno a reflexionar sobre quién se es y cómo se comporta uno.
Independiente, de quién se es, no quiere decir esto que deba usted acomodar su forma de ser a la de los demás. Ni más faltaba. Lo que aquí se sugiere, es que para saber adaptarse o ajustarse a determinadas condiciones laborales (o cotidianas, si se quiere también), debe uno entender a su audiencia, o al grupo objetivo al que pretende impactar, o el entorno en el cual desempeña su gestión profesional.
Es decir que, como seres humanos, todos somo diferentes y, por eso debe uno aprender a comunicarse de diversas maneras, según el tipo de interlocutor con el cual se interactúa.
Ya sabe pues, así que proceda como corresponde.