
Porque reconzco las apreciaciones del perdiodista, es que comparto en este espacio sus nociones sobre el estrepitoso fracaso de la Federación Colombiana de Fútbol en su intención por llegar a Copa Mundial de la FIFA Catar 2022.
Aunque para muchos, es evidente la responsabilidad de la debacle que tienen jugadores, cuerpo técnico y directivos, es fundamental identificar a los campeones como a los saboteadores para así asumir como corresponde el inaludible proceso de innovación que le espera a la Federación Colombiana de Fútbol.
En ese orden de ideas, y una vez identificado el objetivo final, es el momento de encontrar a los campeones. Estos serán los integrantes del equipo que animarán el cambio y alentarán a los demás para que se unan.
Una vez identificados los campeones, se les debe suministrar todos los recursos necesarios y empoderarlos para asumir el reto que está por delante.
Así mismo, se debe identificar a las personas que se opondrán o sabotearán dicho proceso de innovación o transformación. El nivel de compromiso de dichas personas depende de su autoridad, diga usted, por ejemplo; si ‘Ramón Jesurún, con el apoyo fundamental de Álvaro González, zar de la Difútbol’, se oponen a la renovación total de la planilla directiva de la Federación Colombiana de Fútbol, el proceso de innovación, seguramente, se echará a perder.
A pesar de que los líderes a menudo pasan demasiado tiempo pensando en las personas que se opondrán a un determinado plan de innovación o transformación; la expectativa de cambio siempre está presente en la gran mayoría de los integrantes del equipo, independiente, de la cantidad de contradictores y la oposición ejerzan.
Por lo demás, y para el efecto, siempre habrá campeones en el equipo para contrarrestar a los escépticos.