Figure usted a once Tigres en calentamiento previo al partido tocando el balón en rondo. Lo que usted hace cuando no tiene posesión del balón no tiene mayor impacto respecto a qué tan rápido rueda el balón. Sin embargo, cuando tiene usted posesión del balón, cada instante de su dominio es un instante que aporta usted a su dirección.
A dicha dirección se le llama trayectoria decisiva.
Es la irreducible disposición táctica del partido, la totalidad de movimientos requeridos por once jugadores en sincronía para alcanzar la meta al concluir los noventa minutos.
Si usted es de los que hace parte de un equipo de once jugadores, un aspecto fundamental de su labor es identificar dónde ubicar la trayectoria decisiva del balón, al igual que entender si usted es el encargado de ejecutar dicha dirección. El resto del partido puede usted dedicarlo a aportar en conjunto a aquellos que pretenden ejercer su propia trayectoria decisiva del balón.