Más por el sentido de experiencia que por cualquier otra cosa

Sin perder un día más, es necesario que las personas encaren el desafío de la transformación con un objetivo claro, fuerte convicción y mentalidad ganadora. El secreto tal cual lo he aprendido de mi trayectoria profesional, reside en dejar atrás la complacencia que solo conduce a la inmovilidad y, procurar que el cambio se haga parte de la cultura del hogar como de negocio. Los líderes deben ser capaces de impulsarlo, así como están obligados a convencer a todos los miembros del entorno familiar y de negocio de que dicha transformación producirá beneficios sustanciales. Aun cuando, más por el sentido de experiencia que por aquello de “influenciar”, es que cito los aportes del recorrido profesional de los personajes aquí descritos en cuanto a los consejos que darían a su versión más joven, si tuvieran la oportunidad de retomar la senda crucial que les llevó al éxito. Por lo general, se debe aprender a gatear antes de empezar a caminar; por eso creo que las personas deben dominar el entorno personal antes de querer imponer una marca de negocio.