Es evidente que para las empresas y los negocios es cada vez más complejo llegar al consumidor en el entorno digital mediante anuncios tradicionales como ‘pancartas’ y ‘videos incrustados’ (banners y embedded videos, en inglés). Por cuestiones de la tecnología, las susodichas empresas a menudo no logran alcanzar el impacto deseado como consecuencia de todo ese software novedoso que se los impide al bloquear sus anuncios.

El concepto de ‘marketing de atracción’ (inbound marketing, en inglés) no nació ayer. Ya tiene rato y, como es bien sabido, es la táctica de conectarse con la audiencia objetivo a través de contenidos y experiencias que a estos pueden resultarles útil. En ese orden de ideas, los blogs y las redes sociales han sido los canales de preferencia de los mercadólogos para entretener e informar al grupo objetivo. El contenido se gestiona a través de los medios orgánicos, tales como motores de búsqueda o al compartir enlaces con colegas, amigos, familiares, conocidos o desconocidos.

Para el efecto, diga usted, por ejemplo; una publicación de blog hábilmente elaborada sobre el producto o servicio preferido de algún bloguero, le comunicará el mensaje a un determinado perfil de consumidor objetivo de forma tal que una ‘pancarta’ o ‘videos incrustado’ no puede hacerlo.

El ‘marketing de atracción’ ha evolucionado en múltiples ocasiones hasta convertirse en o que hoy se conoce como la ‘optimización de los motores de búsqueda’ o (SEO, de sus siglas en ingles) y, aún por estos días, sigue siendo motivo de lidia cotidiana de cualquier mercadólogo.

Al respecto, y como para dejar tanto rodeo, la táctica resulta productiva si su producto o servicio cuenta con una propuesta de valor (agregado) robusta y notable. El asunto es cuestión de estado mental. A saber, debe usted, procurar ‘pensar por fuera del recuadro o estar predispuesto a retar el statu quo’ o pretender la excelencia en su categoría, entre otros tantos.

Por supuesto, el contenido es fundamental. El tipo de formato depende de usted. En mi caso, un blog escrito ha servido mis propósitos a las mil maravillas. Así pues, le corresponde a usted, elegir el tipo de formato que mejor se ajuste a su perfil, expectativas y necesidades. Tiene un sinfín de alternativas de donde elegir.

Igual, son múltiples las razones por las que usted decida gestionar un blog para su empresa o negocio.

Un blog le ayudará con el posicionamiento. Le aportará dinamismo a su portal empresarial o de negocio. La ofrece al consumidor la oportunidad de interactuar con su empresa o negocio. Le ayudará a optimizar la clasificación de los motores de búsqueda de su empresa o negocio.

Así como cualquier táctica de marketing, la de atracción, también tiene su proceso; sencillo, pero proceso, al fin y al cabo. En este caso, uno de tres módulos. A saber: planificación, análisis y control/retroalimentación.

Planificación— Antes de crear cualquier contenido de marketing e implementarlo (ponerlo en práctica), debe usted tomarse el tiempo necesario para diseñar un plan apropiado. Determine cuál es su audiencia objetivo y propósito (comercial, que no siempre lo es). Quizás, pretenda usted, comercializar un producto o servicio novedoso o captar nuevos integrantes para su audiencia objetivo o promover una noción suya en particular. De ahí en adelante, le corresponde definir el cómo y cuánto pretende usted invertir para lograrlo.

Análisis— El plan facilitará el análisis de efectividad de cada impacto del contenido empleado para alcanzar sus propósitos. Es importante verificar regularmente las cifras relevantes relacionadas con el contenido, diga usted, por ejemplo; cuántas visitas recibe una publicación de su blog, cuántos lectores hicieron clic en su enlace o página comercial o determinar si las ventas han aumentado o no desde que empezó la campaña. Igual, es oportuno establecer metas y puntos de referencia incrementales en su fase de planificación para así otorgar a dichas cifras un valor comparativo.

Control/retroalimentación— Debe controlar y retroalimentar su estrategia una vez que usted haya implementado su plan de acción y disponga de los datos necesarios (los que usted recaba y recopila) para determinar la eficacia de sus tácticas. Pueden ser, extractos de sus aprendizajes, en lugar de comenzar desde cero cada vez que echa a andar un plan de acción. Mantener buenos registros y gestionar informes completos es fundamental para dicho proceso de aprendizaje.

En fin, el ‘marketing de atracción’ o inbound marketing, es una táctica dinámica que, por supuesto, se complementa con otras tantas del entorno digital estratégico (aunque eso es harina de otro costal). Así pues, podrá usted sacar provecho de lo mejor de ambos entornos: el de las nociones y conceptos de marketing tradicional, y el del marketing digital que se nutre y ampara de los grandes volúmenes de datos y la tecnología.